¿No te has planteado alguna vez cómo algunas personas logran siempre meterse a la gente en el bolsillo a pesar de no ser particularmente destacables en nada?

Ocurre porque tienen carisma. Carisma porque saben empatizar: es decir, saben escuchar, lo cual les permite detectar rápidamente qué motivaciones y necesidades tiene la persona que tienen enfrente, cómo captar su atención y cómo resultar interesante.

En los negocios ocurre lo mismo:

Las marcas “carismáticas” (las lovemarks) son aquellas que prestan atención a su público y logran crear una vinculación emocional.

Por eso las lovemarks están en un nivel superior al resto de marcas: cuentan con el amor y respeto del público.

Así que si piensas que para ser una lovemark hay que tener una imagen corporativa más chula, o invertir grandes presupuestos en publicidad, te diré que te equivocas.

¿Cómo llega una marca a convertirse en una lovemark?
Aquí van 10 consejos que puedes aplicar fácilmente y ejemplos para que te sea más fácil entender cada estrategia que te detallo.

1. Dale a tu marca una personalidad
Una marca no es sólo un logotipo. Las marcas han de tener definido un patrón de comportamiento para así poder mantener una misma línea y estilo en todas las acciones de marketing y comunicación que desarrolle. La personalidad de marca se define en función de los valores a los que quieras que sea asociada y se construye según los 12 arquetipos de personalidad de Jung. Te recomiendo leer mi post sobre los arquetipos de personalidad de marca para ver qué arquetipo se adecua más a la tuya.

2. Asocia tu marca a un estilo y actitud ante la vida
Las lovemarks representan una actitud y un estilo de vida. Harley Davidson es un claro ejemplo de ello. Si consigues que tu marca sea referente de un estilo de vida, te será mucho más fácil posicionarte en la mente y corazón de tu público objetivo, y por tanto, convertir tu marca en una lovemark.

3. Asocia tu marca a emociones y empatiza a través de ellas
Todas las lovemarks están dotadas de valor emocional porque saben que es a través de las emociones como se conecta y conquista. Por eso, averigua cuáles son los motivadores de compra que mueven a tu público, y a partir de ahí, desarrolla tu estrategia de comunicación teniendo como eje la empatía.

Dove, por ejemplo, rompió moldes hace años al defender la belleza real de las mujeres con sus curvas, arrugas y kilos de más, frente al resto de marcas de belleza que lo que hacían era mostrar modelos perfectas pero poco reales. De esta forma, Dove logró diferenciarse estratégicamente del resto de marcas, consiguió ganarse la simpatía y respeto de su público (engagement) y en consecuencia, ser líder de ventas.

También puedes ir un paso más allá y crear tú esas emociones ¿Cómo puedes hacerlo? Haciendo que tu público experimente personalmente esas emociones que quieras despertar y asociar a tu marca. La marca de pañales Huggies, por ejemplo, permitió a los padres sentir directamente los movimientos de sus bebes como si los tuvieran en su propio vientre:

4.Motiva y vincula tu marca a retos personales
Las lovemarks son marcas inspiradoras. Transmite a tu público la idea de todo lo que puede llegar a ser y conseguir junto a tu marca.

5. Crea experiencias asociadas a tu Territorio de marca
Una lovemark se vive y se siente. Por eso, organiza eventos y actividades que hagan sentir a tu público las emociones a las que quieres que tu marca sea asociada. Coca Cola, por ejemplo, quiere ser percibida como sinónimo de felicidad, positividad y buen rollo. Por eso, toda su comunicación y marketing va en la línea de su actitud de marca (brand attitude). Seguro que ninguna de las personas que se han topado con alguna de sus acciones de marketing de guerrilla han olvidado la divertida experiencia que la marca les brindó.

6. Adquiere compromisos sociales
Las lovemarks viven por y para su público. Siguiendo con el ejemplo de Coca-Cola, ésta es una lovemark porque, además de su fabulosa estrategia de marketing, ha conseguido ganarse el respeto a lo largo de los años por todas las iniciativas sociales que lleva a cabo. Su campaña “Mucho más que un refresco” alude precisamente a este punto del compromiso social.  

7. Haz partícipe a tu público
Las redes sociales te lo ponen muy fácil hoy en día para hacerles partícipes:
Pregunta a tus seguidores su opinión, pídeles consejo, recomendaciones, sugerencias…

Invítalos a participar con sus fotos: crea concursos, como los que suele hacer Starbucks en Instagram, en los que tengan que subir fotos donde se vea tu marca y el hashtag de tu campaña. A los ganadores puedes, por ejemplo, darles descuentos en sus próximas compras o regalos según el presupuesto con el que cuentes.

Crea concursos de vídeos donde animes a tu público a participar transmitiendo tu actitud de marca, como por ejemplo hizo Johnnie Walker: 

8. Personaliza
La personalización es una estrategia de marketing fantástica que crea vinculación entre marca y cliente y que además genera notoriedad y viralidad. Por ejemplo, Fiat500 permite a través de su web customizar al máximo tu vehículo. Otros ejemplos magistrales de personalización son los que hicieron Nutella y Coca-cola cuando nos permitieron customizar sus envases con nuestros nombres. 

    

Starbucks da ese toque de personalización con el simple hecho de escribir en las bebidas nuestros nombres.

                        

En el mundo de la moda, la firma Louis Vuitton permite a sus clientes personalizar sus artículos.

9. Supera las expectativas
No te limites a vender únicamente ni a cumplir con un estándar de calidad. Sorprende y supera las expectativas de tus clientes para enamorarlos y convertirlos en prescriptores. Un buen ejemplo para ilustrar este punto es la campaña “KLM Surprise” de la compañía aérea KLM. Esta acción de marketing de guerrilla tuvo lugar hace algunos años ya, pero merece la pena rescatarla porque fue una de las marcas pioneras en saber emplear el potencial de las redes sociales para sorprender a sus clientes.

10. Sé detallista y cuida un excelente trato al cliente. Sonríe siempre :) 
Una lovemark no se crea de un día para otro, pero siendo constante y cuidando todos los detalles, conseguirás convertir tu marca en una lovemark amada, respetada y recomendada.

¿Te animas a intentarlo? 

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